Una muestra más del creciente respeto y amor a los animales de la sociedad
Los más pequeños no conciben por qué aún a día de hoy se sigue matando por placer
Javier, un niño malagueño de 13 años, pide explicaciones a la Junta de Andalucía de porqué aún a día de hoy se permite la montería en este parque natural
Estamos viviendo un despertar de la consciencia a todos los niveles y muy particularmente a favor del respeto y la protección de los animales.
Prueba de ello son las reacciones que estamos viviendo en España a raíz del documental de Salvados con lo del escándalo de El Pozo, las cantidad de personas que están volviéndose veganas o vegetarianas cada día, cómo grandes empresas deciden apostar por el respeto animal o prohibiciones de espectáculos y circos con animales.

Javier es el protagonista de esta buena noticia: con 13 años ha escrito una carta a la Junta de Andalucía para que cesen la montería
Pero quizás, donde con más claridad se pone de manifiesto esta nueva sensibilidad, respeto y amor hacia los animales es en los más pequeños: niños, niñas y adolescentes que no conciben cómo podemos como sociedad infringir dolor a los animales o matar por placer.
Con trece años pide ayuda a la Junta para que paren las monterías, como se ha hecho en otros parques
Prueba de ello es la carta que Javier, un niño malagueño de 13 años ha escrito con su puño y letra para pedir explicaciones a la Junta de Andalucía de por qué se permiten aún a día de hoy, las monterías.
Este niño es un amante y defensor de la Naturaleza y asiduo visitante de este hermoso parque natural que tenemos en Andalucía y año tras año se apena por el hecho de que ve menos especies en libertad.

Javier, un amante de la naturaleza, observa un pino centenario en el Parque Natural de la Sierra de Cazorla, Segura y las Villas
Preguntando a los vecinos de la zona, coinciden en que la caza ilegal de furtivos afecta considerablemente al descenso de la fauna en libertad, pero lo que más descenso de población original es, sin lugar a duda, la práctica de la montería.
Con esta carta, Javier quiere «aportar su grano de arena para intentar pedirles ayuda y que se pongan medidas» de cara a que cesen las monterías en este parque natural, para poder así «seguir disfrutando los amantes de la naturaleza, de ver correr en libertad por nuestras Sierras y bosques a toda la variedad de especies tan valiosa e irrepetible que tenemos y que esto siga ocurriendo en las futuras generaciones».
A continuación y con el permiso de sus padres, reproducimos aquí el contenido íntegro de la carta escrita por Javier a la Junta de Andalucía:
La carta de Javier…
Hola mi nombre es Javier, soy un chaval de 13 años, amante y defensor de la Naturaleza en general y de la fauna que puebla nuestros bosques y montañas.
El motivo de este escrito dirigido a el organismo que creo que es quien gestiona los Parques Naturales de Cazorla, Segura y Las Villas, entre otros, es de contarles una situación particular que está sufriendo una zona de este parque y que me produce un gran pena, con el fin de informarles y pedirles que pongan medidas que ya se han sido puestas en otros parques naturales o en otras zonas de este Parque del que les hablo.

Uno de los paisajes que recorre Javier cuando visita el Parque Natural de Cazorla, Segura y las Villas
Desde hace ya 8 años vengo visitando muy a menudo la sierra de Cazorla gracias a la invitación de unos amigos de mis padres que tienen una pequeña casa en plena sierra, en concreto en la zona de la Sierra de la Cabrilla y el Torcal de lobo, situadas cercas del municipio de Pozo alcón. He ido observando que año a año es más difícil encontrar en los largos paseos que doy con mis padres por estas sierras, una gran disminución de la fauna autóctona siendo ya este año 2018 donde hemos llegado a no divisar apenas animales como el ciervo, el gamo, el muflón, etc.

Javier ha notado una disminución de la fauna en los últimos años y pide en su carta a la Junta de Andalucía que tome medidas
Hablando con las personas más mayores del lugar y que han crecido en estas tierras me han explicado los motivos de tal reducción, dejando aparte las diferentes epidemias que han sido bien controladas como la sarna y he querido aportar mi grano de arena para intentar pedirles ayuda y que se pongan medidas.
Sabemos que en estas sierras está extendida la práctica ilegal de caza por furtivos que intentan ser controlados con los medios de que se disponen por agentes del Seprona y aunque es cierto que es muy complicado parar esta práctica por los pocos medios humanos de que se disponen y la gran extensión que tiene esta sierra cada año hay un estimado de 100 piezas matadas de manera indiscriminada para quitarle sus cuernos.

Javier junto a la encina milenaria en la zona del almiceran Pozo Alcón, justo en la zona de caza
También hay una explotación cinegética por especies mediante recechos siempre controlados por los guardas del Egmasa que supone el derribo de otras tantas piezas pero en menor medida que el furtivismo.
Pero sin duda el problema de esa disminución drástica de las diferentes especies que cada vez menos pueblan las sierras de La Cabrilla y del Torcal del Lobo es la montería anual que se realiza con las realas de perros suelto hostigando a las diferentes especies que salen despavoridas sin saber que van a acabar tiroteadas por decenas de cazadores que sin pudor disparan a todo lo que se le pasa por delante del puesto sin distinguir especies permitidas y no. Esta montería el año pasado provoco la muerte de más de 300 animales de las diferentes especies, una cantidad que está muy por encima de las muertes provocadas por furtivos y los recechos.

Javier recorre junto a su familia estos parajes y ha preguntado a los vecinos de la zona cuál es la causa de que se haya reducido la fauna. La respuesta: la montería
Sé que este tipo de montería se realizaba en otras partes de la Sierra de Cazorla donde hay mucho mas turismo y donde el avistar la fauna es fuente de atracción para el turista y de ingresos para los Hoteleros y hosteleros entre otros y que gracias a las enérgicas protestas que han hecho año tras año a los organismos que gestionan el parque, han conseguido que se deje de hacer esta montería cada año de manera definitiva o cambiando su periodicidad dejando hasta dos año de espacio de tiempo entre montería y montería, algo que sin duda ayuda a la repoblación de la fauna.

En su carta, Javier pide a la Junta de Andalucía que finalicen las monterías, para poder disfrutar de estos paisajes y que los animales estén en ellos en libertad
Por todo esto les pido encarecidamente que estudien la situación actual y pongan medidas para que podamos seguir disfrutando los amantes de la naturaleza, de ver correr en libertad por nuestras Sierras y bosques a toda la variedad de especies tan valiosa e irrepetible que tenemos y que esto siga ocurriendo en las futuras generaciones.

Javier aporta su granito de arena con esta carta, que sin duda, servirá para algo bueno
Espero de corazón que este escrito sirva para algo y llegue a las personas que tienen la responsabilidad y el trabajo de proteger algo que es de todos.
Muchas gracias y me daría gran alegría recibir una respuesta.
Un saludo
¿Qué bueno vedad? Un niño de trece años que se capaz de expresar por escrito todos estos pensamientos y sentimientos que reflejan su amor a los animales, plasmarlos en una carta y enviarla al organismo correspondiente para tratar de hacer lago bueno, aportando su granito de arena para mejorar este mundo.
Enhorabuena y gracias Javier, seguro que sí sirve y de mucho tu acción, que seguro no es la primera. Esta es la nueva humanidad, la nueva conciencia que ya está aquí y que desde Cuentamealgobueno estamos retransmitiendo.
Agradecemos a Javier y a sus familiares que nos hayan hecho llegar su carta junto con las bellas fotografías de la Sierra de Cazorla, Segura y las Villas y que hayan querido compartirlo con los lectores de Cuentamealgobueno.
Esta buena noticia ha sido amadrinada por:
Sole García Cano de Málaga.
¿Y tú, quieres convertirte en padrino o madrina de buenas noticias?…