Cuando lo único que importa es el amor.

¿Aún no tienes planes para este fin de semana? Desde cuentamealgobueno.com queremos recomendaros una nueva sesión de cine positivo para disfrutar en familia. En esta ocasión os traemos la película Yo soy Sam (2001).

Se trata de una película acerca de la importancia de la familia, el perpetuo lazo entre un padre y una hija a pesar de las dificultades. Amor, familia y amistad, lucha y superación, garra y coraje, son algunos de los valores que nos enseña la historia de Yo soy Sam, y que nos recuerda, una vez más, la importancia de derribar cualquier tipo de prejuicio. Nada es imposible.

-Vídeo: Yo Soy Sam-Trailer Español HD-

El filme, que narra la historia de un hombre con discapacidad mental y la relación con su hija, está protagonizado por Sean Penn, Michelle Pfeiffer y Dakota Fanning. La película lanzó a la entonces pequeña Dakota a la fama, convirtiéndola en la actriz más joven de la historia en ser nominada para un Premio del Sindicato de Actores.

Adentrándonos un poco en su argumento, la película narra las dificultades que atraviesan Sam Dawson, un padre soltero que sufre discapacidad mental, y su hija Lucy, sobre todo a partir de que la pequeña va creciendo y superando a su padre en capacidad mental.

Los problemas se acentúan cuando el Estado cuestiona la capacidad de Sam para educar a su hija. Una prestigiosa abogada, Rita Harrison, se encargará de la defensa de Sam, convertido en un padre coraje que hará todo lo necesario por mantener la custodia de su hija.

Aunque en un primer momento Harrison muestra desinterés y cierta frialdad por el caso; tras conocer a Sam y el amor que siente por su hija, la abogada se dejará la piel en defender los derechos de Sam como padre.

Mientras se resuelven todos los procesos judiciales, Lucy queda bajo la custodia de unos padres adoptivos que buscan el bienestar de la pequeña. Sin embargo, Lucy sólo quiere pasar tiempo con su padre, por lo que todas las noches se escapa junto a él.

Finalmente, todos entienden que para Lucy no hay mejor lugar en el que vivir que junto a Sam. La película concluye con la pequeña jugando un partido de fútbol bajo la atenta mirada de todo un grupo de amigos que velará por el bienestar de Sam y Lucy.

Los compañeros de Sam, también con discapacidad mental; la abogada Rita Harrison y su hijo, quienes consiguen mejorar su relación; y los padres de acogida de Lucy, mostrarán su apoyo incondicional a Sam, ayudándolo a sacar adelante a la pequeña Lucy.

Sin duda alguna, una película que nos recuerda que uno de los requisitos fundamentales para educar y enseñar a los más pequeños es el amor que pongamos en ello. A pesar de las dificultades, todo irá bien cuando lo único que importa es el amor.