Máquinas expendedoras de microrrelatos.

Al cabo del día es mucho el tiempo muerto que se acumula entre rato y rato. Mientras esperamos al autobús, mientras esperamos a un amigo, mientras esperamos mesa para comer o mientras esperamos entre clase y clase. ¿Qué podemos hacer mientras tanto?

La agencia de publicidad Short Édition ha tenido una brillante idea para disfrutar de estos pequeños ratos: leer. La compañía ha creado máquinas expendedoras que en lugar de vender dulces, bebidas o snacks, ofrecen microrrelatos completamente gratuitos.

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La idea surgió cuando Christophe Sibieude, cofundador de la empresa, se encontraba con sus amigos frente a una máquina expendedora de comida, según ha explicado a la Agence-France Presse“Pensamos que podríamos hacer lo mismo con literatura popular de calidad para llenar esos pequeños e improductivos momentos”.

Las máquinas están pensadas para ser instaladas en espacios públicos como el Ayuntamiento, librerías, centros sociales u oficinas de turismo. Además, ofrecen historias de acuerdo al tiempo que quieras pasar leyendo, con opción de leer uno, tres o cinco minutos. 

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Sin embargo, esta no es la primera iniciativa de este tipo. Varias ciudades del mundo ya incorporan en sus calles actividades similares. La Librería Pública de Toronto, Canadá, está instalando este tipo de quioscos en el transporte público. Asimismo, en Cluj-Napopca, Rumanía, existe una iniciativa literaria llamada ‘Travel By Book’ que ofrece viajes en autobús y tren gratuitos a todos los pasajeros que lean libros en papel durante el trayecto.

¡Una fantástica idea para potenciar la lectura y la cultura!

Fuente:

Upsocl