Un bonito gesto de Manuel Jesús Ruiz y de su familia.

«Me gustaría que lo que hagas te lo hagan a ti».

Se encargó de buscar a la dueña del móvil, llamarla, localizarla y entregárselo personalmente.

Hoy publicamos en Cuentamealgobueno una buena noticia, un bonito gesto de un ciudadano para con otro a quien desconocía y por el que hizo algo bueno, lo que nos recuerda que sí, hay gente buena en este mundo.

En los tiempos que corren, un teléfono móvil tiene hoy día más capacidad que el mejor de los computadores de hace décadas.

Tenemos en nuestra palma de la mano un aparato con el que convivimos cada día, con el que hablamos con nuestros familiares, vemos y almacenamos fotos y vídeos de nuestros seres queridos y estamos en permanente contacto con nuestro mundo.

Perder un smartphone hoy en día supone mucho más que perder un aparato electrónico. Significa, en la mayoría de los casos, perder una parte de ti, intimidad, recuerdos que, que si no has sido previsor puedes perder para siempre.

El Caminito del Rey - Foto Wikipedia.

El Caminito del Rey – Foto Wikipedia.

Y esto ha sido precisamente lo que le ha pasado a un familiar, llamémosle Sra. X, que perdió su teléfono móvil.

Para colmo, lo hizo precisamente en un lugar alejado de la ciudad, en el recién re-abierto Caminito del Rey, en el Chorro (Málaga) una preciosa senda campestre malagueña.

El móvil, se le escapó de la mochila, que estaba rota, y se calló a una roca.

Allí quedó hasta que el protagonista de nuestra historia, Manuel Jesús Ruiz, se lo encontró.

Ese mismo día, Manuel, que trabaja en Documentación Clínica en el Hospital Clínico de Málaga, se encontraba disfrutando junto a su mujer e hijos de un día de campo en el Caminito.

En concreto se encontraban en las ruinas de Bobastro, en donde se percataron de que había un teléfono móvil en unas rocas.

Afortunadamente para la Sra. X., Manuel es una buena persona y lo primero que pensó al encontrarlo fue en devolverlo.

«Lo primero que dices es ostras un móvil y si en mi casa lo pierde alguien, me gustaría que lo devolvieran» explica Manuel a Cuentamealgobueno.com.

«En las ruinas había una guía», prosigue Manuel, «pensando que el móvil podía ser de alguien del grupo, se lo llevamos a la guía».

La guía le confirmó que no era suyo ni de su grupo y le ofreció que ya ellos se encargarían de devolverlo a través del ayuntamiento del pueblo.

Las ruinas de Bobastro, lugar donde Manuel y su familia encontraron el móvil. Foto: Wikipedia.

Las ruinas de Bobastro, lugar donde Manuel y su familia encontraron el móvil. Foto: Wikipedia.

Pero Manolo era firme en su decisión de devolverlo a su dueño y quizás, pensando que el móvil podría quedar olvidado en la sección de objetos perdidos del pueblo, decidió hacerse cargo de él y encargarse personalmente de entregarlo a su dueño.

«Como mi intención era devolverlo, así tenía certeza de que lo iba a devolver».

Y dicho y hecho, en lugar de dejarlo como objeto perdido, pasó a la acción: «busqué si en la agenda había algún contacto que empezara por AA algo [Avisar A…], y vimos un AA de una persona y le escribí un whatsapp, pero no había cobertura».

Cuando ya consiguió tener cobertura, habló con ese contacto, a quien llamó desde su propio teléfono móvil, para no hacer ningún gasto al teléfono que se había encontrado.

El contacto confirmó quién era la dueña y que se encontraba en el Caminito del Rey. Manolo y su familia trataron de encontrarla del móvil en el mismo Caminito, pero sin éxito.

Tras ello, se puso de acuerdo con ella para devolvérselo al día siguiente; es más, se molestó en quedar en un sitio concreto en Málaga, al que se desplazó expresamente para devolverlo a su dueña.

La Sra. X afirma: «Hemos tenido mucha suerte, gracias a Manolo, porque no es normal que te devuelvan nada».

El móvil perdido feliz y a salvo en casa de la Sra. X, gracias a la ayuda de Manuel y de su familia. Foto: Cuentamealgobueno.

El móvil perdido, ya feliz y a salvo en casa de la Sra. X, gracias a la ayuda de Manuel y de su familia. Foto: Cuentamealgobueno.

Cuando le hemos preguntado a Manolo por qué devolvió el móvil, nos ha contado que «Me gustaría que lo que hagas, te lo hagan a ti«.

«El móvil está bastan bien, lo primero que puedes decir es para mí, cualquier otro lo apaga y se lo queda, pero nuestro primer pensamiento fue devolverlo a su dueña».

Que fue lo que finalmente logró este buen ciudadano. «Esto es karma, el mundo iría mejor si todos actuáramos así».

Este no es más que un sencillo pero bonito gesto que, como un efecto bola de nieve, puede motivar a que otras personas hagan también algo bueno por los demás. Ayudarnos mutuamente y crear una sociedad mejor cada día, algo que ya está pasando.

¡Gracias Manuel y familia!